ElRubius era un chico normal y corriente que se dedicaba a pasar el rato jugando a videojuegos, y echándose unas risas . A diferencia de los demás en aquellos tiempos, él daba un paso más y grababa sus gameplays mientras comentaba de una manera de lo más alocada. Hasta allí nada del otro mundo, nada que llame la atención de una manera especial. La vida de cualquier chaval adolescente. Fin de la historia. Pasamos a otro programa. Pero no estaríamos escribiendo estas líneas si ésta fuera una historia más.
Ya desde sus inicios, el joven Rubius tenía un no sé qué diferente a los demás. Llámalo carisma, llámalo saber hacer reír, soltarse, llámalo x. Tenía un modo particular de hacer las bromas y de conectar con el público. Era un don que solo estaba a su alcance.
Las claves del éxito del vídeo de las flechipollas
Un juego: Skyrim. Un video: flechipollas. Era el video que acabaría de catapultar a Rubius, el inicio de una trayectoria que lo acabaría llevando al olimpo de los youtubers. Toda la leyenda tiene un inicio, y la de este chaval se originó aquí. Este video ha quedado grabado por la posterioridad en el recuerdo de sus fans. ¿Y cuáles han sido las claves para que este vídeo triunfará tanto? Vamos a verlo a continuación.
- Un juego con un mundo abierto: Skyrim es un RPG que aporta una enorme libertad de acción a lo largo de su mapa. De este modo a la hora de hacer el gameplay, tienes mucho margen de maniobra para interactuar con diversidad de personajes y elementos distintos. Esto se traduce en mayores posibilidades de creación, y para alguien con la cabeza llena de disparatadas ideas eso es una mina de oro.
- Un mod peculiar: Flechas convencionales que habían tomado forma de pene y que explícitamente desentonaban de la estética general del juego. Ya se trata de un elemento que da a entender que no estamos ante un gamemplay al uso, sino que tiene toda la pinta de derrochar dosis de humor.
- Una canción pegadiza: Tengo un cuerno de mamut, tengo un cuerno de mamut, te lo meto por el culo. Vista así no tiene nada como para lanzar cohetes digamos. Una frase para hacer gracia sin mucho trasfondo detrás. Sin embargo tenía un ritmo que enganchaba, que no perdía la gracia a las primeras de cambio, sino que cada vez que mirabas el vídeo te hacía reír. Y el que no había visto este video, empezaba a oír a una persona cantar la canción, luego a otra, y así hasta que la curiosidad le llevaba a ver el vídeo… y así se propagaba este gen.
- Indiscutiblemente los comentarios y la personalidad: Todo lo anterior no sería nada sin los comentarios aportados por ElRubius. Es sin duda el gran valor del vídeo, su seña de identidad. Comentarios que en muchas ocasiones no tienen ningún sentido pero son pronunciados en el momento justo y de la mejor manera. Sin duda ese toque especial proveniente del youtuber es lo que ha acabado por encajar todas las piezas del puzzle.
El triunfo de las flechipollas… y el resto ya es historia
A partir de allí las cosas fueron pasando a una velocidad vertiginosa sin que el propio Rubius tuviera tiempo de tomar consciencia de lo que estaba viviendo. Más y más suscriptores, toneladas de likes, entrevista por aquí y por allá, invitaciones a todo tipo de eventos… Y así acabo convirtiéndose en todo una superestrella de Youtube. Lo que empezó siendo un mero entretenimiento y una buena manera de echarse unas risas, acabó convirtiéndose en una forma de vivir, en un lifestyle con el que muchos sueñan. Todo gracias a esas flechipollas. Con ellas empezó el legado de Rubius.